TE METÁLICO

Estoy loca

estamos en el mes de Julio

(a él le pertenece)

y yo

(loca)

preparándome un té,

dizque de doce flores

pero la cajita sólo menciona

seis olores

ya distinguí tres:

jamaica,

naranjo

y manzanilla,

en mi té

(de loca).

Ahora pienso

que me gustaría

ser como la bolsita de té

dejar mi esencia en lo que me rodea.

Luego pienso

¡pobre bolsita!

con tanto calor

y bañándola en agua hirviendo.

De pronto

empiezan a perseguirme

mis fantasmas mentales

supongo que igual quieren beber té.

Ya saben la mano en tu espalda

que no te toca,

la persona monstruosa

que va a cruzar de golpe la puerta

y no la cruza,

las manos que jalan los pies

y ni te rozan,

fantasmas de las doce de la noche

que van a espacios abiertos,

como la cocina,

a tomar té

(de loca).

He esperado un momento,

a que se enfríe mi té

D’ lo-K

lo pruebo

sinceramente…

sabe a rayos,

a metálico,

me digo

“quizás no sé preparar té”

(como si tuviera alguna ciencia)

tal vez fue

a cucharita metálica

que introduje

para presionar a la bolsita

a dar más de si misma

(creo que a veces exprimo el amor

con la frialdad de una cucharita metálica)

no,

quizá la taza tenía otras cosas

quizá la falta de azúcar

(¡excusas,

excusas!).